The Sandringham Hotel Weston-super-Mare

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve la oportunidad de alojarme en el Sandringham Hotel, una experiencia que, aunque tuvo sus altibajos, destaca por su ubicación privilegiada frente al Grand Pier y la bahía de Weston-Super-Mare. El personal, encabezado por la amable Lisa, fue un verdadero punto a favor, siempre con una sonrisa, lo que definitivamente es un valor añadido cuando se viaja. El desayuno gratuito fue un verdadero festín: desde deliciosos pasteles hasta una opción de un completo desayuno inglés, ideal para reponer energías antes de un día explorando la zona, que incluye el hermoso Mendip Hills y la playa. No obstante, debo mencionar que aunque el servicio y la comida eran agradables, las instalaciones del hotel estaban bastante deterioradas. La habitación que me tocó era cómoda y tenía lo básico, como un baño privado y facilidades para preparar té y café. Sin embargo, el olor del entorno y la necesidad de una renovación urgente eran evidentemente una asignatura pendiente. A pesar de su estado, disfrutar de una buena conversación con amigos en el bar, donde también se ofrecían entretenimientos en vivo, hizo que nuestra estadía fuera más placentera. En resumen, el Sandringham Hotel tiene mucho potencial gracias a su encantadora ubicación y a su personal, pero necesita urgentemente una puesta al día para poder ofrecer una experiencia de alojamiento que no solo sea buena en teoría, sino también en la práctica.